miércoles, 30 de abril de 2014

Desarrollo del Liderazgo

Al preguntarse por qué no hay mejores líderes con todos los recursos que se invierten en programas de aprendizaje, de seguro la respuesta es compleja, pero una parte se debe a que no se están desarrollando adecuadamente las habilidades y competencias de liderazgo, y hasta en muchos casos se ignoran. Hoy está claro que no se puede utilizar el poder posicional para jefear a los equipos, se debe liderar. Muchos gerentes suelen confundir la administración con el liderazgo, y se sabe que un gerente o jefe no necesariamente es un líder y que un líder no necesariamente tiene un puesto alto o tiene gente a su cargo. Por eso es necesario tener en cuenta las competencias para ejercer un buen liderazgo.
Como tradicionalmente el enfoque para nombrar a los gerentes es el orientado a resultados, entonces buscan gerentes que se destaquen por sus conocimientos o experiencia técnica, son gerentes solucionadores de problemas, pero sin liderazgo. Lo correcto sería seleccionar gerentes que posean, además de amplios conocimientos, probadas habilidades para liderarse a sí mismos, y saber liderar personas y equipos, que estén orientados hacia los resultados y las personas. Este sería el enfoque del gerente-líder, que da el ejemplo, que construye personas y equipos, y sabe que los resultados los producen personas y equipos inspirados y motivados.
Desarrollar las habilidades de liderazgo gerencial debe estar entre los objetivos estratégicos organizacionales. Esto se logra con diversas herramientas a través de programas de aprendizaje, Coaching Ejecutivo y aprendiendo a liderar liderando, no en el aula. Los adultos aprenden mejor cuando ven cómo el aprendizaje impacta y está alineado con las metas del trabajo.
Recordemos que existe una relación directa entre la efectividad de un líder y la productividad y los resultados de la organización.

Vía: MPC Coaching

lunes, 28 de abril de 2014

Hablar de crisis es promoverla

Vivimos un mundo que fluye sin parar, rodeados de vientos de cambio, en donde cada vez son más las certezas que se pierden. Sin embargo, una de las únicas cosas seguras que si tenemos al iniciar este año, es un lienzo en blanco y el dibujo que estaremos creando día a día de acuerdo a nuestra actitud.
Una vez Einstein dijo que hablar de crisis era promoverla y callar en la crisis era exaltar el conformismo. Dejemos de quejarnos o de ignorar la realidad, y ocupémonos de ser más creativos, la creatividad es inherente dentro del universo y brilla esplendorosamente dentro de cada uno de nosotros.



Muchas personas están pensando que son víctimas de las circunstancias y que hay muy pocas cosas que puedan hacer para cambiarlas. Cuando una persona se siente víctima de una situación, o cree que no tiene manera de poder cambiarla, se está auto limitando de una manera muy fuerte. Hay que eliminar el viejo rol de víctima y cambiar la visión al nuevo paradigma representado por el rol de que yo puedo crear mi propia realidad con mis pensamientos, actitudes y acciones.
Estamos viviendo tiempos de cambio y como dijo el CEO de una Fortune 500 a sus gerentes: “O administran el cambio, o cambiamos la administración.”
Recuerde que el éxito del viaje no depende de la manera en que el viento sopla, sino de cómo se ajusta la vela. El marinero experto hace que el viento lo lleve donde él quiere ir, y no donde el viento lo quiere llevar.
Indiscutiblemente cuando finalice el año que recién comienza, el lienzo tendrá una pintura. Esta pintura puede ser una obra de arte, o cualquier boceto y esto va a depender únicamente de la actitud y el compromiso de cómo cada uno de nosotros asuma el reto.
Tomemos consciencia de que muchos comportamientos, creencias y actitudes que en el pasado nos condujeron al éxito- hoy pueden llevarnos a la ruina.
Este y otros articulos de interes personal y profesional los podras encontar en el siguiente enlace: Vía: MPC Coaching

viernes, 11 de abril de 2014

Vivir con propósito

¿Alguna vez no has sabido para qué sirve un objeto y has intentado darle diversos usos para los que no fue creado? Nadie puede sabe mejor como funciona un artefacto o para que sirve, que su propio inventor. Lo mismo sucede con nosotros, aunque nosotros no somos artefactos ni Dios nuestro inventor, sino más bien nuestro creador, quien mejor que él para decirte para que has sido creado y que has venido a hacer.
Hace mucho Aristóteles llegó a la conclusión de que lo que los hombres buscan más que nada es ser felices. Todos queremos ser felices; sin embargo el tiempo pasa y vemos como malgastamos nuestra vida y ha transcurrido entre ansiedad y aburrimiento.
El anhelo de felicidad es algo con lo que fuímos creados, tiene que ver con el propósito para el que fuímos diseñados; la verdadera felicidad depende de cómo interpretamos la vida, es necesario entonces desprogramarnos de aquello que genéticamente o por influencia de la sociedad hemos creido que podía hacernos felices.
Una vez leí un pensamiento que decía “No te preguntes que necesita el mundo, sino preocúpate por ser tu mismo, que lo que más necesita la humanidad es gente que se atreva a vivir su propia identidad”
Deja que la vida fluya, empieza por pensar bien de ti mismo, que eres una creación maravillosa. Tú próposito inicial es que descubras quien eres realmente, que aprendas a ser tu, vivíte con sinceridad, descubre tus verdaderos anhelos, no te averguences de ellos ni sientas que son de poca importancia, lo que tú has venido a hacer es lo que más importa.
¿Entonces para que estás hecho?, lo descubriras sin afanes, con calma. Preguntale a tu creador.
Vía: MPC Coaching

jueves, 10 de abril de 2014

Liderazgo en tiempo de crisis: Una Oportunidad de Crecer Parte II

Como líder, tu oportunidad de colocar en orden, tus pensamientos y emociones, ante la adversidad, es una manera de alinear tu energía interna hacia un objetivo mayor: La toma de consciencia o el aprendizaje que está disponible para mí en esa situación.
Un ejemplo claro de aprovechar las crisis como una oportunidad, es la secuencia biográfica en el área política y financiera de Abraham Lincoln, observen una muestra histórica donde la constancia ante las crisis puede traer resultados positivos, como la presidencia de los Estados Unidos de América:
  • Falló en los negocios en 1831.
  • Perdió para legislador en 1832.
  • Falló en los negocios por segunda vez, terminando en quiebra económica en 1833.
  • Sufrió un quiebre nervioso en 1836, y fue internado en un hospital.
  • Perdió para vocal en 1838.
  • Perdió para elector en 1840.
  • Perdió para congresista en 1843.
  • Perdió para congresista en 1848.
  • Perdió para el senado en 1855.
  • Perdió para vicepresidente en 1856.
  • Perdió para senador en 1858.
  • Es electo presidente de los Estados Unidos de Norteamérica en 1860.
Resumiendo, los momentos de crisis no son ajenos a ninguno de nosotros. De hecho es algo normal que se da en nuestra vida a todos los niveles como el profesional, el afectivo, el financiero, etc., la diferencia radica en la manera que afrontemos los cambios. En época de crisis es cuando se pone a prueba la naturaleza de cada ser humano. Podemos llorar y quejarnos, o podemos ver la oportunidad que existe.
Todo reside en su mayor parte en descubrir el aprendizaje detrás de la crisis, la actitud que asumo frente a la situación: una actitud neutra o positiva ante la situación aparentemente inmanejable, la capacidad de auto-recuperarme (Resiliencia) y como nos mostró Abraham Lincoln: “No dejes de estar en movimiento”.
¿Utilizas el poder personal de elegir tu actitud en las crisis que enfrentas en tu vida?  Te invitamos a reflexionarlo.

martes, 8 de abril de 2014

Liderazgo en tiempo de crisis: Una Oportunidad de Crecer Parte I

Los chinos hablaban en un refrán antiguo que las crisis eran oportunidades, como una forma de motivar o conectar el hecho que los seres humanos que viven un proceso de crisis, puedan buscar dentro de ellos, junto con el apoyo externo tangible o intangible, una oportunidad de poder encontrar soluciones, y cuando escribo del “apoyo”, es que se recibe de las formas más extrañas y sutiles.
¿Cómo ejercer el liderazgo en esos momentos? Puede decirse que el liderazgo es el conjunto de capacidades que un ser humano tiene para influir en un conjunto de personas, haciendo que este equipo trabaje con entusiasmo en el logro de metas y objetivos; ahora, ¿Cómo podría “autoliderizar” para equilibrar mis pensamientos y emociones en un momento de crisis?
Hace unos años, en un capítulo de Los Simpsons®, Lisa recordaba que los chinos usan la misma palabra para designar crisis y oportunidad. Buscando estas palabras en internet, básicamente en un buscador como Google®, puedes encontrar comentarios breves, pero interesantes, ya que nos proporciona claves esenciales para interpretar lo que estoy diciendo, en el chino:
危机 (Crisis)
机会 (Oportunidad)
Si se fijan, el último ideograma de “crisis” es el primero para “oportunidad”. En cada crisis hay una oportunidad. Esto se aplica, por ejemplo, en la lucha activista por la libertad en Internet, o a la crisis que está viviendo la industria del entretenimiento del cine con las copias, o incluso cualquier país de Latinoamérica, donde observamos una crisis de valores, manifestada por síntomas de crisis en lo institucional, político, económico y social, y si lo llevamos al plano personal: una desilusión amorosa, la desintegración familiar, el no alcanzar un objetivo o un sueño, nos refleja que estamos en una crisis.
En cada crisis hay una oportunidad y a más profunda la crisis más importante y mejor puede resultar la oportunidad. En muchas ocasiones es difícil ver la oportunidad, o resulta más cómodo no buscarla, pero si no la buscamos nosotros, alguien lo hará. En la lucha por las libertades es incluso deseable que las cosas estén muy mal; eso abre auténticas puertas para luchar, aunque se haga contra fuerzas muy superiores. Jamás hay que menospreciar el tesón humano de aquellos que buscan la verdad (aunque no estén en posesión de ella).

Si te interesan estos artículos te invitamos a que visites: MPC Coaching donde encontraras muchos mas artículos de tu interés personal y profesional  

lunes, 7 de abril de 2014

¿Qué es la motivación?

La motivación es una mezcla de pasión, propósito, toma de decisiones y compromiso. Es un nivel profundo que genera energía y vida para desempeñarse adecuadamente en la actividad que a uno le apasiona.

Motivación es tener pasión por vivir, es nuestra propia recompensa por nuestro buen desempeño. Con motivación estaremos dispuestos a correr riesgos y tomar decisiones que la mayoría de personas no harían por miedo. También nos da compromiso que es la clave para convertirse en una persona de alto desempeño.
La motivación nos da sentido a la vida. ¿Cuánto esfuerzo estoy dispuesto a hacer? ¿Cuántos obstáculos estoy dispuesto a pasar? ¿Cuál precio estoy dispuesto a pagar?
Motivación es la energía que nos hace seguir y acometer hacia el logro de nuestros sueños, sin excusas, sin quejarse, de manera imparable, haciendo lo correcto y tomando riesgos. Al ser la motivación pura energía, tiene mucho que ver con nuestra bioquímica, con el ejercicio que hacemos y con la manera como nos alimentamos.
¿Cuál es el propósito que nos mueve a seguir adelante? ¿Cuáles riesgos estoy dispuesto a enfrentar? ¿Cuáles son mis necesidades psicológicas internas? ¿En qué clase de persona me quiero convertir? ¿Qué me apasiona en la vida? Estas son algunas de las preguntas que me ayudan a encontrar esa pasión por la vida.
No se puede ser una persona motivada y al mismo tiempo estar confortable, sin correr riesgos, ni tomar decisiones. La persona motivada está comprometida y dispuesta a correr riesgos, pues sabe que puede cambiar su situación actual, que tiene el control de su vida en sus manos, que puede lograr lo que pretenda, sabe que quiere a corto, mediano y largo plazo, se siente contenta y exitosa.
La motivación nos llena y nos da un sentido de logro y control, por lo que la persona motivada ama lo que hace y hace lo que ama. Entonces, lo mejor que podemos hacer por nuestro futuro, por nuestros seres queridos y por nuestra patria, es vivir con pasión y no para la pensión... Revise su nivel de motivación y si el tanque está bajo, haga lo necesario para llenarlo, pues esta es la energía que le da sentido a la vida.

Vía: MPC Coaching

martes, 1 de abril de 2014

Miedo a vender

“El principal motivo de fracaso de un emprendedor es el miedo a vender.”

Si estás pensando en ser emprendedor, especialmente si vas a ser freelance, debes tener en cuenta que uno de los aspectos que más influyen en el fracaso de este tipo de iniciativas es el miedo a vender.
Quieras o no vas a tener que vender, independientemente de cuál sea tu producto o tu servicio. Vender es el proceso de mayor importancia en cualquier actividad empresarial. Fíjate que si eres buen vendedor puedes llegar a vender cualquier cosa aunque no la tengas; en todo caso el problema será conseguir aquello que has vendido para poderlo entregar a tu cliente. De hecho hay auténticos “conseguidores” que se dedican a vender productos o servicios que no tienen y una vez vendidos buscan a alguien que lo fabrique o provea. En cambio si fabricas un producto pero no lo vendes, por muy bueno que sea, vas a tener dificultades para seguir adelante.
Si tu problema es “vender” siempre puedes buscar a alguien que lo haga por ti, pero probablemente no estés en situación de pagar a alguien por hacer ese trabajo. Así que o te decides a solucionar tu problema con las ventas o mejor que no empieces el negocio, y en este último caso no hace falta que continúes leyendo.
¿Qué crees que te provoca esa incapacidad para vender?
Tal vez sea miedo al rechazo, a que te digan que no quieren tu producto, con lo bueno que es. Piensa un poco ¿qué pasa si te dicen “no”? ¿cuál sería la peor consecuencia de un “no”? ¿qué muera una persona? ¿Va a suceder eso? Estoy seguro de que no va  a morir nadie. Eso sí, vas a sentir algo dentro de ti que tal vez te duela, pero o te acostumbras a ese dolor hasta que ya no lo sientas, o lo vas a tener difícil en el apasionante mundo de la venta. Estadísticamente está demostrado que no vas a conseguir una efectividad del 100% en tus intentos de venta. Eso significa que siempre va a haber un porcentaje de “no” en tus acciones de venta. Por lo tanto, cuanto antes alcances tu porcentaje de “no” antes alcanzarás tus “sí”.



Tal vez tengas una imagen distorsionada de lo que es el mundo de la venta y los vendedores. Quizás pienses que los vendedores son unos vividores, unos charlatanes o unos mentirosos y, claro, tu no quieres tener esa imagen. Estoy de acuerdo contigo, yo tampoco quiero tener esa imagen. Y es que no todos los vendedores son así, si bien es cierto que, como en todos los colectivos profesionales, hay algunos individuos que deshonran la profesión. Si eres honesto y tu producto o servicio realmente cubre las necesidades de tus clientes no hay nada de qué avergonzarse.
Puede que seas de los que dice “yo no sé vender”. En ese caso te remito al post “Vender más” donde podrás ver que cualquiera tiene capacidad para vender. Tu negocio o tu producto han sido diseñados para “satisfacer necesidades de tus clientes” a ser posible obteniendo una rentabilidad a cambio. Dicho de otra forma, tu objetivo es solucionar un problema a alguien que está dispuesto a pagar por ello. En este punto debes revisar tu confianza en tu producto o servicio, y en ti mismo, porque si es eso lo que está fallando vas a tener muy complicado alcanzar el éxito.
Si lo que te sucede es que no te gusta vender significa que tampoco te gusta ser emprendedor. Suena duro, pero emprender equivale a vender. Aun en el supuesto de que busques a alguien que venda por ti, también a ese alguien le vas a tener que vender tu idea, tu servicio, tu producto. Si no ¿cómo le vas a convencer para que lo venda? Quizás aquí empieces a ver por dónde va tu problema. Te ves capaz de convencer a alguien para que venda tu producto pero no a alguien para que lo compre y pague por él.
Que no te guste vender es muy respetable pero , ¿alguna vez te preguntaste por qué no te gusta vender? Muy probablemente te estés auto-limitando. En el proceso de venta debes conectar con el comprador y resulta muy difícil si no estás convencido al 100% de que puedes hacerlo. Resulta muy difícil si no crees al 100% en tu producto o servicio y, lo más importante, en ti.
Un buen amigo me enseñó la fórmula del éxito:
ÉXITO = (conocimientos + habilidad) * actitud
Tal vez te falten conocimientos, que puedes adquirir mediante un curso apropiado. Tal vez te falte habilidad, que puedes adquirir con la práctica y la perseverancia. Pero lo más importante en la venta, y en casi todo en la vida, es la actitud con la que afrontas tus retos. Y es importante porque, como puedes ver en la fórmula, la actitud es un factor multiplicador (te invito a que calcules tu éxito poniéndole tus valores a cada uno de los factores que intervienen en la fórmula) y si trabajas tu actitud estarás multiplicando tus posibilidades de éxito. Y justo ahí es donde te puede ser de gran ayuda tu coach.
Para màs artículos visita: MPC Coaching